En fin, estoy algo cansada de estar luchando contra viento y marea siempre. Cuando no es una cosa, es la otra. Siempre hay algo que me recuerda que nunca hallaré la felicidad completa. Siempre hay alguien que tiene una pega y me lo recuerda.
No es fácil ser como yo, tener que aguantar comentarios que minan tu dignidad, tu moral y tu autoestima. Otra en mi lugar, ya habría desistido.
Creo que nunca he hecho daño a nadie, y si lo he hecho ha sido inconscientemente e inevitablemente. Siempre he procurado ser buena con las personas a mi alrededor y complacerlas en todo. Pero no sirve de nada, no se me regala nada y no soy tan inútil, ni tan mala para no merecer lo que quiero.
No es tanto lo que pido. Vivir tranquila, en paz y medianamente feliz. Sin problemas no se valoraría la felicidad, pero en serio ya he demostrado infinitamente que se valorar todo lo poco o mucho que se me da.
Sólo quiero vivir el momento como me apetezca, estar en cada momento con quien me apetezca de verdad, hacer cosas que realmente me apetecen. Parece que habla una adolescente, pero no es así. Habla una adulta que quiere ser adulta pero que no la deja su familia, la sociedad y la economía.
Tengo 23 años, y la vida que se me permite llevar parece que tengo 15 años. En mi carnet, pone la fecha de mi nacimiento y legalmente puedo beber, fumar, conducir y votar. Sin embargo, en realidad llevo una vida de "quinceañera aburrida" porque mi etapa de salir con mis amigas ya la pasé. Debería estar trabajando hace 3 años, tendría que haberme independizado hace un año. Y ahora mismo debería de estar pensando en un futuro familiar si quisiera. Sin embargo, nada de esto está pasando. No es tanto lo que pido. Solo quiero vivir la vida que realmente me merezco. Y ya llevo 3 años de retraso.
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